Hace pocos días, el mundo del periodismo argentino recibió una noticia que impactó profundamente: el querido y respetado periodista Tato Young sufrió un Accidente Cerebrovascular (ACV), lo que lo llevó a una urgente intervención quirúrgica en la Clínica La Trinidad de Palermo. Fue un golpe inesperado para quienes lo siguen a diario en su rol como conductor de Radio Mitre, donde se ha ganado el afecto y la admiración de colegas y oyentes por igual.
El 20 de septiembre, Young fue trasladado al sanatorio tras una descompensación. «Fue un accidente inesperado, producto de una aneurisma. Fue operado, bien tarde, en el Sanatorio de la Trinidad», informó su compañera y locutora, María Isabel Sánchez, quien conmovida agradeció que la operación “salió bien, gracias a Dios”. Sin embargo, el panorama sigue siendo delicado.
Un día después, su ex pareja y madre de sus hijos, la periodista Lorena Maciel, brindó una actualización sobre su salud. “Son días difíciles porque el cuadro es delicado», expresó con sinceridad, aunque no perdió la esperanza: “Tato es fuerte. Tenemos mucha fe que va a estar bien”. Sus palabras resonaron como un eco de esperanza en un momento cargado de incertidumbre.
En medio de las preocupaciones y los mensajes de aliento que no dejaron de llegar de colegas y amigos, una de las demostraciones más conmovedoras fue la de Cristina Pérez, histórica conductora de Telefe y reciente ganadora del Martín Fierro de Oro. Con un gesto cargado de emoción, la periodista usó sus redes sociales para solidarizarse con su colega en este momento tan complejo.
Con tan solo tres palabras, Cristina Pérez expresó todo su cariño y apoyo hacia Tato. En respuesta a un posteo de su colega Claudio Savoia, quien escribió palabras de aliento para el periodista, Pérez simplemente dijo: “¡Fuerza Tato Querido!”. Tres palabras que, por su sencillez y cercanía, alcanzaron a reflejar la empatía y el respeto que siente por su colega.
Ese breve mensaje resonó en las redes como una muestra de afecto puro, de solidaridad entre compañeros de profesión que, en medio de la vorágine diaria, no olvidan que detrás de cada pantalla y cada micrófono hay seres humanos con historias y fragilidades. Cristina Pérez, con su gesto, recordó a todos que la fuerza de la palabra es inmensa, incluso cuando es pronunciada con suavidad.
Las redes se llenaron de mensajes similares, mostrando el enorme cariño y apoyo que Tato ha cosechado a lo largo de su carrera. No solo de sus colegas, sino también de miles de oyentes y seguidores que han aprendido a quererlo y a respetarlo por su trabajo, pero sobre todo, por su humanidad.
Desde aquí, nos sumamos a esos deseos de recuperación. Ojalá que la fuerza que ha recibido de Cristina y de tantos otros le dé a Tato Young el impulso necesario para superar este momento difícil. ¡Fuerza Tato Querido!