Roberto García Moritan le dio la espalda a Su

La legendaria conductora de televisión Susana Giménez vivió un mal día tras fracasar en su intento por llevar a su programa dominical a Roberto García Moritán. En medio de una agitada agenda mediática, Susana esperaba un gran golpe televisivo al convencer al exesposo de Pampita para que se sentara en su famoso living y hablara sobre su separación. Sin embargo, sus esfuerzos resultaron infructuosos.

El trasfondo del escándalo

La separación entre Pampita y Roberto García Moritán fue un tema que, aunque ha quedado opacado por otras noticias del espectáculo, sigue siendo objeto de interés público. La modelo, conocida por su fuerte carácter y transparencia, decidió hablar del tema en el programa de Susana semanas atrás, cobrando una supuesta cifra de 30.000 dólares. Sin embargo, su entrevista decepcionó a la audiencia, ya que Pampita evitó profundizar en los motivos de la ruptura y se mantuvo en la superficie, lo que dejó a la diva visiblemente molesta.

Determinada a completar la historia, Susana puso el foco en Moritán, conocido no solo por su relación con Pampita sino también por su perfil bajo y su reciente incursión en la política. Convencerlo de aparecer en televisión parecía ser la manera de satisfacer a una audiencia ansiosa por conocer su versión de los hechos.

Negociaciones fallidas

Según reveló Yanina Latorre en el programa LAM, los productores de Susana realizaron múltiples intentos para que Moritán aceptara la invitación, ofreciéndole una cifra superior a los 30.000 dólares que había cobrado Pampita. Sin embargo, a pesar de las jugosas ofertas, el empresario y político dejó claro que no estaba interesado en ventilar aspectos de su vida privada en público.

«Dijo Moritán: ‘No me den nada, porque no voy a hablar'», comentó Latorre, destacando la firme postura de Moritán frente a las insistentes propuestas de la producción del programa. Incluso se mencionó que Susana, acostumbrada a salirse con la suya, intentó interceder personalmente para lograr que aceptara. Sin embargo, el silencio del exesposo de Pampita fue más poderoso que cualquier suma de dinero.

Un revés para Susana

El rechazo de Moritán dejó a Susana con las manos vacías y sin el esperado “golpe mediático” que prometía revitalizar su ciclo dominical. Este episodio pone en evidencia una realidad que a veces pasa desapercibida en el mundo del espectáculo: no todos están dispuestos a intercambiar privacidad por dinero o fama.

Por su parte, el público sigue dividido. Algunos valoran la decisión de Moritán de mantener su vida personal al margen del escándalo, mientras que otros critican lo que consideran una falta de interés en aclarar ciertos puntos de su separación. En cualquier caso, el resultado fue un mal día para Susana, quien, según fuentes cercanas, está evaluando nuevas estrategias para atraer a figuras relevantes al programa.

¿Y ahora qué?

El silencio de Moritán no solo frustró los planes de Susana, sino que también abrió interrogantes sobre qué tan lejos está dispuesta a llegar la diva para recuperar su trono en la televisión argentina. Mientras tanto, su fallido intento de entrevistar al empresario se suma a la lista de desafíos que enfrenta en su nueva temporada.

Este episodio también refleja un cambio en el consumo mediático, donde las figuras públicas parecen estar más interesadas en controlar sus narrativas que en someterse al escrutinio de la televisión tradicional. Si bien Susana no consiguió la entrevista que buscaba, el tema sigue dando que hablar y mantiene al público expectante ante los próximos movimientos de la diva y sus invitados.

Por ahora, Susana tendrá que conformarse con buscar otros temas que mantengan su programa en el centro de la escena mediática.